Hoy hemos sabido que Mark Zuckerberg y su esposa Priscilla Chan han sido padres. Eso y que van a donar el 99% de sus acciones de Facebook para fundar la Chan Zuckerberg Initiative para ayudar a los niños de la generación de su recién nacida hija.
La idea es perfecta y estupenda, de hecho suena incluso utópico el hecho de que un multimillonario se desprenda de casi toda su fortuna; pero vamos a entrar un poco mas allá en los hechos.
Aplicando lo que se conoce como relación de proporcionalidad entre dos valores conocidos y un tercer valor para calcular el cuarto, vamos, lo que se ha llamado toda la vida regla de tres nos sale lo siguiente:
Si Zuckerberg y Chan pretenden donar el 99% de sus acciones de Facebook, que tienen un valor de 45.000 Millones de dólares, dividiendo esta cantidad entre 99 obtendremos el precio del 1% restante sin vender, es decir, Mr. Facebook aún se queda con 454.545.454 dólares, para entendernos sin tanto número, mas de 454 Millones de dólares.
A esto, debemos sumarle la posible subida del valor de acción unitaria que puede sufrir Facebook tras este anuncio (así que su 1% valdría aún mas), manteniendo la posición de control en las votaciones de la empresa y siguiendo con su cargo de CEO de Facebook.
Además, si tenemos en cuenta los dividendos que ofrecerá ese 1% de acciones y que Zuckerberg no gasta demasiado en ropa, hambre no va a pasar.
¿Que conclusión obtenemos de todo esto?
Puro marketing. Si de verdad quiere donar y ayudar, lo hace y punto, sin escribir una carta en su página de Facebook ni hacerse ver como el hombre mágico del país feliz de la casa de gominola de la calle de la piruleta, aunque también es cierto que hacerlo sin dar ningún motivo generaría controversia y caos en la bolsa, touché.